A principios de agosto hubo una gran polémica con el Instituto Timoteo, un colegio de la zona sur de la capital salteña, después de que una familia lo denunciara ante el INADI por discriminación. Esto se debió a que en el formulario de inscripción para estudiantes el colegio aclara que «el Instituto Timoteo trata a sus alumnos de acuerdo con su sexo al nacer».
En el mismo documento, la institución preguntó a tutores de los alumnos y alumnas si se comprometían a trabajar con el colegio en la búsqueda de un pase a otro establecimiento en caso de que, con el correr del tiempo, el niño, la niña o el joven decidan «ser tratados de una manera distinta, no de acuerdo con su sexo al nacer».
Ante esto, intervino el Ministerio de Educación desde la Dirección de Educación Privada y el colegio decidió retirar el formulario de la página de Facebook y reemplazarlo por otro. “Tanto la Dirección Privada como el colegio tuvo noticia de esta situación a través de uno de los medios. Cuando salió la noticia nos comunicamos con el colegio para ver qué estaba pasando”, comentó Adriana Prieto, directora general de Educación Privada del Ministerio de Educación, en Radio Pacífico.
Prieto explicó que cuando comenzó a circular el formulario donde efectivamente había discriminación hablaron con el colegio, quienes entendieron cuál era el reclamo. “El colegio decidió bajar el formulario porque entendieron la sensación de discriminación y la falta de los mismos valores que ellos pregonan. Presentaron una nota en la Dirección Privada donde explicaron la situación y pidieron disculpas a quienes pudieron ofender o hacer sentir mal porque no era su intención”, contó.
Adriana aseguró que cuando se dan este tipo de situaciones con instituciones educativas “siempre se dialoga y conversa porque la normativa es para todos. En este caso no hubo sanción porque el colegio no se dio cuenta, no era su intención”.
